Preparando tu Testimonio de 3 Minutos

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3 Tipos de Testimonios Básicos 

Hay muchísimas maneras para darle forma a tu historia, pero estas son algunas maneras que hemos visto funcionar muy bien:

• Una Declaración Simple - Puedes compartir una declaración simple de porqué decidiste seguir a Jesús. Esto funciona muy bien con un nuevo creyente.
• Antes y Después - Puedes compartir tu historia de “antes” y “después” - Como era tu vida antes de conocer a Jesús y como es tu vida ahora. Simple y poderosa.
• Con y Sin - Puedes compartir tu historia “con” y “sin” - Como es tu vida “con Jesús” y como seria “sin Él”. Esta versión de tu historia funciona bien si te convertiste a una edad temprana.

3 Partes para Compartir tu Testimonio 

Cuando compartas tu historia, es útil pensar en ella como un proceso de tres partes:

• Su Historia - Pregúntale a la persona con la que estás hablando de su trayectoria espiritual.
• Tu Historia - Luego, comparte tu testimonio modelado de acuerdo a la experiencia de la persona.
• La Historia de Dios - Finalmente, comparte la historia de Dios, de manera que conecte con la forma de pensar, los valores y prioridades de la persona.

Tu testimonio no tendrá que ser largo ni incluir muchos detalles para ser impactante. De hecho, mantener tu historia alrededor de 3 minutos dará tiempo para hacer preguntas y tener conversaciones más profundas.  Si estás preocupado por como comenzar - se sencillo. Dios puede utilizar tu historia para cambiar vidas, pero recuerda - Tu eres el único que puede contarla.

Preguntarse a uno mismo

1. ¿Qué miedos falsos nos impiden compartir nuestro testimonio?
2. ¿Qué hace que un testimonio sea efectivo? ¿De dónde viene su poder?